El otro día escribí sobre anillos 'discretos' y muy llevables, y hoy voy a hacerlo sobre los espectaculares y 'cómodos´ collares que han creado los diseñadores de algunas de las grandes firmas en bisutería de lujo.
El conjunto de la modelo pertenece a la firma neoyorkina Dannijo, que dicen está inspirado en aires tribales. En conjunto de collar, pendientes y brazalete ronda los 850 euros.
Para mi, el totalmente tribal es el que corresponde a la diseñadora Delfina Delettrez, la que ha lanzado los anillos para los pies, y que nos recuerda a los adornos, en base a aros, que lucen algunas mujeres de tribus africanas o las indias norteamericanas; aunque opto más por la inspiración africana. Su precio 945 euros.
El collar totalmente rígido de Alexander Mc.Queen es... sinceramente no sé cómo definirlo. Cómodo no parece, llamativo sí es, bonito seguro que también, puesto del revés puede hasta protegerte las cervicales pero es estrictamente necesario disponer de un cuello largo y estilizado; de lo contario, no te lo colocas ni con calzador.
¿Favorecedor?... ¡Desde luego! Pero para una modelo, que cumpla esas características y vaya ataviada una indumentaria poco recargada; para el resto... Además los 995 euros que cuesta, ya impide bastantes pruebas de complementos coordinados.
¿Favorecedor?... ¡Desde luego! Pero para una modelo, que cumpla esas características y vaya ataviada una indumentaria poco recargada; para el resto... Además los 995 euros que cuesta, ya impide bastantes pruebas de complementos coordinados.
Lo dicho, ya en varias ocasiones, pretenden convertirnos en auténticos y luminosos árboles de Navidad, y eso os lo dice una amante de collares, pendientes, anillos y resto de cachivaches poco discretos.
3 comentarios:
El collarín rígido es para que con los calores y sudores, se te caiga la piel a tiras. ¡Madre, que horror!
La auténtica tortura china: calor, sudor y todo bien pegado al cuello y ya de paso un jersey de cuello alto y... ¡tan frescas!!! No hay como sufrir para ir a la moda. Ja, ja, ja
¡Dios que aparatosos complementos!
Eso si es llevar kilo y medio de quincalla encima. Paso. Y lo de las abejitas, ¡ridículo!
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