¡PROTÉGETE DEL SOL!

Durante estos meses de verano el sol pica y de lo lindo, no se a vosotras pero a mi me recalienta las ideas y me cuece el cerebro.
Parece mentira que en un país como España, con el rabioso 'Lorenzo' que tenemos, no vayamos todo el verano con hermosos sombreros cubriendo nuestra cabeza. No lo entiendo.

 

Hay que admitirlo, en este país lo de los sombreros es raro de ver y yo, como vieja usuaria y gran amante de ese complemento, he podido observar como hace algunos años me miraban 'raro', ahora como ya ni me miran... ;-)

 

Mi primer sombrero fue el típico tirolés que compré en mi horroroso viaje a Viena. ¡Hermosa ciudad pero que gente tan borde!... Los días que estuve allí, me lo puse diariamente; ya en Barcelona quedó decorativamente colgado en el perchero. En todas las capitales europeas el sombrero es un complemento habitual en mujeres de todas las edades, en Barcelona no; será por el clima, pero es que tampoco he visto que se utilicen en Madrid.

 

Al cabo de un tiempo y no recuerdo por qué me atreví a ponérmelo, la gente me dijo que me quedaba muy bien y desde entonces seguí con boinas, pamelas, casquetes de piel y sombreros masculinos. En invierno, es raro verme sin sombrero, más aún cuando hace frío, pero en verano... en verano es otra cosa... Me da la sensación de que estoy montando el número, por lo tanto voy por la calle con la sesera echando humo. ¿Por qué?... Supongo que debido a la tonta costumbre de mirar lo que hacen los demás. ¡Con el bonito panamá que me compré hace dos años y aún no he estrenado!...

 

Venga, a ver si nos animamos y llenamos nuestras calles de coloridos sombreros de paja, nuestra 'azotea' nos lo agradecerá y yo podré estrenar el 'panamá'.